Judd Trump y Kyren Wilson, dos jugadores maduros, de ataque, con personalidad y hambre de títulos, caminan juntos mientras escriben su historia en el snooker.
Lo de la precocidad, a veces, puede ser un arma de doble filo. Tenemos el ejemplo más reciente de Stan Moody. Sobre el que se pusieron demasiadas expectativas y parece que no ha progresado como se esperaba.
Toda la razón, Enrique. Hay que estar muy mentalizado porque ganar un partido de snooker es muy difícil. Apuntas bien con Stan Moody, que la temporada pasada apenas sumó puntos, pero sus buenos resultados y su regularidad de este curso le aseguran mantenerse en el circuito por vía de la lista anual.
Lo de la precocidad, a veces, puede ser un arma de doble filo. Tenemos el ejemplo más reciente de Stan Moody. Sobre el que se pusieron demasiadas expectativas y parece que no ha progresado como se esperaba.
Toda la razón, Enrique. Hay que estar muy mentalizado porque ganar un partido de snooker es muy difícil. Apuntas bien con Stan Moody, que la temporada pasada apenas sumó puntos, pero sus buenos resultados y su regularidad de este curso le aseguran mantenerse en el circuito por vía de la lista anual.